No voy a negar que es un buen profesor, porque lo es. A pesar de no siempre estar de acuerdo con las distintas posturas es muy abierto para aclarar su punto de vista. La participación es fundamental y lo único malo es que tiene a sus favoritos que favorece demasiado, tienes que hacerte su amigx.

Es AMLOVER y eso está de hueva. Sus lecturas y sus clases son buenas, amenas y digeribles. Sus adjuntas medio tontas. Es barco si lo quieres.

El profesor, aunque amable, es uno de los docentes más sobrevalorados de la facultad: su clase consiste en oír sus aventuras personales y alguna que otra aclaración sobre las lecturas correspondientes. Es favoritista (en especial con las chicas que le gustan) y barco. Definitivamente hay mejores.